Es común experimentar
nostalgia por los años pasados, suspirar por alguna época en la que se vivió, o
desear haber coincidido en el tiempo con los personajes que se admiran.
En “Midnight in Paris”,
Woody Allen, guionista y director, construye una historia en la que Gil, aspirante
a novelista, acompaña a la familia de su prometida en un viaje a la “ciudad
luz”.
Durante la estadía en la capital francesa, Gil sale a caminar por las
noches, para evocar el París en el que vivieron aquellos escritores por los que
profesa admiración. En sus caminatas será transportado a un mundo de fantasía,
al que decide regresar en cada salida.
Se trata de una encantadora
película, en la que Allen derrocha creatividad, haciendo que el espectador sea
participe de la fantasía del protagonista. Como en casi toda su filmografía, el
personaje principal es un alter ego de Woody, con todos sus tics y sus
neurosis.
Gil es interpretado por Owen
Wilson, quien hace una gran labor, principalmente en la expresión corporal y la
modulación de la voz. En el elenco aparecen: Marion Cotillard (Adriana), Rachel
McAdams (Inez), Kathy Bates (Gert), Michael Sheen (Paul), Adrien Brody
(Salvador), Nina Arianda (Carol), Mimi Kennedy (Wendy), Kurt Fuller (John),
Carla Bruni (guía del museo), Léa Seydoux (Gabrielle), Tom Hiddleston. Todos
tienen papeles de poco tiempo en pantalla, pero son imprescindibles para el
desarrollo de la trama.
Cuando de Woody Allen se
trata la exigencia es grande. Aunque su vitalidad como director y escritor no
decae, y sigue filmando a ritmo de película por año, superar lo conseguido con
anterioridad es difícil. Para “Media noche en París” escribió un guión
altamente creativo, que se disfruta en cada escena y que contiene diálogos
brillantes, pero tiene en contra que el filme lo apreciarán más quienes posean
una cultura general arriba del promedio. De cualquier forma, una película
regular de Allen equivale a una excelente de las otras.
Calificación
8/10
@FernandoRamosB
@FernandoRamosB
A mi me encantó. La vi dos veces en días consecutivos y la seguí disfrutando la segunda vez tanto como la primera. Uno cree ser el personaje y estar disfrutando de ver a tantos genios juntos y asombrarse junto con él con cada nuevo encuentro. ¿que piensa de la Piel que habito?
ResponderEliminarMarielos
De acuerdo, en la medida que uno reconoce a los personajes se disfruta más la película.
EliminarLa piel que habito tiene tres facetas: 1. la relativa al aspecto visual es impecable, como casi todo lo de Almodovar, la fotografía es característica y muy bien lograda. 2. Las actuaciones no son buenas, Banderas nunca aprendió a actuar, por eso es que su mejor trabajo lo logra en El gato con botas, en el que presta la voz. Los otros personajes son algo caricaturescos. 3. El guión es rebuscado, es un problema con Almodovar, por querer causar efecto se pierde.
En resumen, eso pienso. Gracias por comentar.
Yo es que enamoré de Gil Pender, de su ingenuidad de su inocencia... de su manera tan limpia de ver la vida. Todavia me sorprende lo mucho que me gustó la película, teniendo en cuenta que Owen Wilson no me calaba ni un poco, sin embargo me replanteé totalmente ese sentimiento gracias a esta maravilla de Woody Allen! :)
ResponderEliminarSaludos Fernando!!
Owen Wilson no es mal actor, le pasa que se pierde en las comedias fáciles, Woody Allen siempre ha tenido buen ojo para identificar a los buenos actores. El guión es lo mejor de la película, por eso se disfruta tanto.
ResponderEliminarSaludos.