Los desórdenes mentales se manifiestan de las formas más diversas, y raras. Es como dice la sabiduría popular: cada loco con su tema. Aunque observar a personas que padecen ciertas enfermedades, o síndromes, puede llegar a ser perturbador.
Una de esas enfermedades que presentan síntomas extraños, aunque no deterioran abruptamente el físico de quien la padece, es el síndrome de Diógenes, que toma su nombre de aquel célebre filósofo griego, quien vivía en una tinaja (o tonel), y llevaba en su mano una lámpara. Ateniéndose a la historia y comparando la vida del filósofo con quienes sufren la enfermedad hay cierta divergencia.
Las personas con tal padecimiento se recluyen en sus casas, tienen la sensación de vivir en la miseria, por lo que acumulan cosas, incluyendo dinero, pensando que les pueden servir en el futuro, se aíslan de la sociedad y descuidan la higiene, algunos conviven con animales; la suma de todo las lleva a vivir en la podredumbre y la mugre.
En 1975 Albert y David Maysles filmaron un documental sobre Edith Ewing Bouvier Beale y Edith Bouvier Beale, madre e hija; tía y prima de la célebre Jacqueline Bouvier Kennedy Onassis. Ellas se recluyeron en su casa y perdieron el contacto con la sociedad, la madre antes que la hija. El documental narra parte de esa vida. En abril de 2009 fue estrenada la película Grey Gardens, realizada para la televisión por HBO.
La película está basada, en parte, en el trabajo de los Maysles; pero a partir de la recreación de las imágenes del documental se utiliza el recurso del flash back, para incursionar en la vida previa de las protagonistas, de esa forma se busca mostrar los eventos que las llevaron a adoptar semejante conducta.
En los papeles protagónicos se puede ver a Jessica Lange (la madre) y a Drew Barrimore (la hija), ambas logran actuaciones excelentes. Cada una se sumerge en su rol y, mientras dura la cinta, se convierten en aquellas mujeres que cambiaron los sueños de grandeza y fama por el aislamiento y la suciedad.
El argumento del filme bordea la crítica a la sociedad estadounidense, aunque en este caso fue la realidad la que se encargó de mostrar lo paradójico de la vida en el jet-set.
Se sabe que ante la falta de reyes y reynas, la familia Kennedy pasó a suplir esa carencia de realeza y fue encumbrada a niveles ridículos; en donde el glamour era lo más importante. Mientras Jacqueline Bouvier se casaba con John F. Kennedy, y después con Aristóteles Onassis, su tía y su prima vivían en la peor de las miserias. Claro que no era su culpa, pero la historia se presta para ejemplificar las luces y sombras de las familias reales.
Grey Gardens, dirigida por Michael Sucsy, es una producción de gran factura y formidables actuaciones. Se le puede reclamar que no profundiza en las motivaciones de los personajes. Fuera de eso, se trata de un producto sólido, que merece la pena ver. Méritos aparte, tiene diecisiete nominaciones a los premios Emmy de este año.
Calificación 8/10
Una de esas enfermedades que presentan síntomas extraños, aunque no deterioran abruptamente el físico de quien la padece, es el síndrome de Diógenes, que toma su nombre de aquel célebre filósofo griego, quien vivía en una tinaja (o tonel), y llevaba en su mano una lámpara. Ateniéndose a la historia y comparando la vida del filósofo con quienes sufren la enfermedad hay cierta divergencia.
Las personas con tal padecimiento se recluyen en sus casas, tienen la sensación de vivir en la miseria, por lo que acumulan cosas, incluyendo dinero, pensando que les pueden servir en el futuro, se aíslan de la sociedad y descuidan la higiene, algunos conviven con animales; la suma de todo las lleva a vivir en la podredumbre y la mugre.
En 1975 Albert y David Maysles filmaron un documental sobre Edith Ewing Bouvier Beale y Edith Bouvier Beale, madre e hija; tía y prima de la célebre Jacqueline Bouvier Kennedy Onassis. Ellas se recluyeron en su casa y perdieron el contacto con la sociedad, la madre antes que la hija. El documental narra parte de esa vida. En abril de 2009 fue estrenada la película Grey Gardens, realizada para la televisión por HBO.
La película está basada, en parte, en el trabajo de los Maysles; pero a partir de la recreación de las imágenes del documental se utiliza el recurso del flash back, para incursionar en la vida previa de las protagonistas, de esa forma se busca mostrar los eventos que las llevaron a adoptar semejante conducta.
En los papeles protagónicos se puede ver a Jessica Lange (la madre) y a Drew Barrimore (la hija), ambas logran actuaciones excelentes. Cada una se sumerge en su rol y, mientras dura la cinta, se convierten en aquellas mujeres que cambiaron los sueños de grandeza y fama por el aislamiento y la suciedad.
El argumento del filme bordea la crítica a la sociedad estadounidense, aunque en este caso fue la realidad la que se encargó de mostrar lo paradójico de la vida en el jet-set.
Se sabe que ante la falta de reyes y reynas, la familia Kennedy pasó a suplir esa carencia de realeza y fue encumbrada a niveles ridículos; en donde el glamour era lo más importante. Mientras Jacqueline Bouvier se casaba con John F. Kennedy, y después con Aristóteles Onassis, su tía y su prima vivían en la peor de las miserias. Claro que no era su culpa, pero la historia se presta para ejemplificar las luces y sombras de las familias reales.
Grey Gardens, dirigida por Michael Sucsy, es una producción de gran factura y formidables actuaciones. Se le puede reclamar que no profundiza en las motivaciones de los personajes. Fuera de eso, se trata de un producto sólido, que merece la pena ver. Méritos aparte, tiene diecisiete nominaciones a los premios Emmy de este año.
Calificación 8/10
Muy buena película y además la puesta en evidencia de la enfermedad que padecían, mucha gente no le da la importancia que tiene a las enfermedades mentales y eso hasta puede ser algo peor que las enfermedades físicas. Por otra parte, las dos mujeres actúan muy bien.
ResponderEliminarBuen filme, hay que verlo.
Sandra
Tiene muy buena pinta. Me la apunto.
ResponderEliminarSalud.
Eso sí me interesa. Conozco dos personas con ese síndrome (no sabía cómo se llamaba ni por qué). Es triste porque ambas son de buenas familias...
ResponderEliminarApapachos.
p.d.
Te dejé un comentario en Little Miss Sunshine, finalmente la vi y lo primero que hice fue contárelo.
Sandra: La parte de la enfermedad es buena, como bien lo dice, la película vale la pena. Gracias por comentar.
ResponderEliminarMiquelet: Amigo Miquelet, que bueno verlo, quiere decir que su blog ya está en el aire de nuevo, por allá llegaré a visitarlo.
Nancy: Espero que puedas ver la película y que bueno que viste Little Miss Sunshine; es una película divertida.
Saludos
Me ha merecido la pena encontrarme con tu blog, es toda una sorpresa los temas que tratas, interesantes, cotidianos, sociales. Seguro que te seguiré visitando, me gusta.
ResponderEliminarIsabel Gómez
Psicoisapecat: Y me ha merecido la pena que lo haya encontrado. Por acá la espero. Bienvenida Isabel.
ResponderEliminarSaludos
La vi y buscando aldo del sindrome de Diógenes dí con tu blog. Las actuaciones de Drew y Jessica Lange son excelentes. No abordan en los temas personales pero toda la atmósfera nos dice inplícitamente cual era esa relación de dependencia entre ambas. En fin, al final lo que a mi parecer intenta mostrar la película es sólo estos dos personajes interdependientes y su relación con la casa que pasa a ser otro personaje más. A mi parecer la casa es un símbolo del espíritu independiente de la madre, lo único que ERA de ella, lo que hacía sentirse , paradójicamente libre.
ResponderEliminarGracias por tocar esta película para la tv. Saludos y éxitos Fernando.